03 Mar Cantalapiedra, Gabriel Martínez
Gabriel Cantalapiedra es uno de los artistas que está vinculado al MACVAC desde sus inicios. Fue miembro fundador del museo, su primer secretario, su restaurador y uno de los primeros artistas en adquirir casa en Vilafamés. Cantalapiedra cursó sus estudios de pintura en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Carlos de Valencia y amplió sus conocimientos de decoración y restauración en París y Roma, donde intervino en las restauraciones de la residencia del Palacio de Versalles y de la Capilla Sixtina en el Vaticano. Artista polifacético, decorador y restaurador, su vertiente más creativa y rompedora la ofrece en sus creaciones a medio camino entre la escultura y la pintura; creaciones que han llevado a muchos a catalogar su obra dentro de neoconstructivismo valenciano, aunque sus formas geométricas, acompañadas de juegos de repeticiones, simetrías y movimiento con una clara intención de provocar la percepción del espectador, lo sitúan dentro de los presupuestos del op art y el arte cinético.
“Gabriel Cantalapiedra está haciendo aportaciones válidas, dignas del mayor estímulo dentro de las corrientes experimentales más comprometidas, en la búsqueda de un futuro para los quehaceres artísticos en el contexto del mundo tecnológico.” (Vicente Aguilera Cerni)
Año: Calanda, Teruel, 1933-València, 1997
Título de la obra: Composición
Año: 1987
Medidas: 238 x 138 x 90 cm
Técnica: Escultura cinética: madera, esmalte, hierro y metacrilato
Tipología: Escultura
Inventario: 120
Contexto: Si tuviéramos que definir esta obra en dos palabras, éstas serían: movimiento y geometría. En esta composición, Cantalapiedra nos muestra varias placas de metacrilato que dan vueltas alrededor de un eje rectangular pintado con colores planos describiendo líneas geométricas. El artista, al igual que en muchas otras de sus obras, nos propone una creación con múltiples caras, una composición que con el girar de las placas de metacrilato, con los juegos de luz y colores que produce este movimiento y con el propio punto de vista que adopte el espectador, encierra formas ilimitadas de mostrarse y, como resultado final, nos ofrece un espectáculo visual.
Sala: 25
